
No me levanté con ánimo de andar cerca de 30 kilómetros, pero los anduve. Esta noche dormiré en Oporto, en la Plaza de Carlos Alberto, donde está el monumento a los caidos en la Gran Guerra. Cogí plaza en un hotel, un viejo hotel que no llega a tener veinte habitaciones. Pero mi cama es casi más grande que la habitación y en la ducha hay agua caliente. Como siempre, me ha tocado en una tercera planta, como esta noche pasada en Malaposta y como la noche que dormí en Coimbra y como en aquella ocasión tampoco aquí había ascensor. Seguir leyendo: http://www.berenguela.com/15-de-mayo-de-2019-de-malaposta-a-porto/2019-05-28