
Ya os conté que no es difícil encontrarse con una floristería en esta envejecida Habana de Centro Habana o Habana Vieja, hoy pasé por delante de tres. Era temprano. El lugar donde quisimos desayunar, en el 860 de Neptuno todavía no había abierto, la mujer que estaba al otro lado de la puerta nos dijo que lo harían a las nueve. No esperamos, seguimos caminando hasta el boliche que hay en San Rafael, a la altura del 581, casi enfrente de un mercado que siempre tiene mucho movimiento y más a estas horas tempranas. Seguir leyendo: https://viloriagrandesviajes.com/viaje-a-cuba-de-rodolfo-lueiro-14-de-abril-de-2018/